CATALUÑA, Jul-2018
Última vez que bailamos en España…
Siguen ocurriendo los mismos patrones de falta de comunicación y entendimiento al mismo tiempo, siguen ocurriendo las mismas situaciones en contextos distintos… sería acertado decir que esta es una de las particularidades del proyecto.
NEWBURY, ENGLAND
Penúltima parada.
El ambiente de este pueblo de Londres no se ha parecido a ningún otro. El público estaba perfectamente preparado a hora punta, cumpliendo los límites establecidos para el espectáculo.
Acostumbrados a un público más cercano, simple y diverso, este fue muy diferente. Frío y distante, limpio y ordenado, personas tan respetuosas y colocadas tan perfectamente y tan atentos condicionados por el contexto de ser audiencia de una performance de danza, que ni las percibía, no las sentía. Fue esa energía la que más me faltó.
BUDAPEST, HUNGRY
Último destino de un enorme viaje.
Dos años por digerir. Dos años de muchísimas experiencias, vivencias, conclusiones y patrones, tanto personales como artísticos, que me llevo conmigo para siempre. He crecido con este proyecto y estoy orgullosa de cada momento.
Momentos difíciles que me han ayudado a aprender y comprender, después convertidos satisfacción entendiendo lo importante que es apreciar el presente y apreciarlo con perspectiva. Qué pequeños somos y qué grande es el mundo, ¿no? Veo las cosas de otro modo, más interesantes y menos importantes, sobre todo veo las cosas que son reales. Relacionarme con personas tan diferentes en situaciones tan diferentes bajo una presión tan peculiar, han creado una bomba perfecta para darle un vuelco a mi cabeza, a mi cuerpo, a mi concepción de mente y cuerpo.
Acepto ampliamente este trascurso del tiempo y cómo ha fluido conmigo. Todo ha pasado por alguna razón, y lo mejor es que soy consciente de la mayoría de esas razones.
Así, confío en el ahora, en que los hechos irán por el camino que se dibujen.
Ha sido un proyecto puro, real y vivo.
Text & images : Lucía Bocanegra
Dancer participating in the SHAPERS project
